La invención de lo clásico: las catedrales góticas.

 


    La arquitectura clásica se caracteriza por su precisión geométrica, simetría y proporción. Las catedrales góticas son parte de la arquitectura clásica europea y se destacan por su simetría, decoración, uso de arcos y cristales teñidos. Dado a que las catedrales cuentan con espacios abiertos en forma de domo y otros aspectos arquitectónicos importantes se crea el ambiente perfecto para una experiencia sensorial que te inmerge en la belleza de estos espacios sagrados. Cada una de estas catedrales enseña cuan avanzada estaba la arquitectura clásica para su tiempo.

    Las catedrales se pueden caracterizar por su imponente simetría y estructuras majestuosas que se alzan hacia el cielo. Estos impresionantes edificios se distinguen por su decoración, que incluye intricados relieves y tallas detalladas en piedra. Además, las catedrales góticas utilizan arcos apuntados y bóvedas de crucería para soportar sus techos abovedados, creando una sensación de grandiosidad y elevación. Otra característica distintiva son los impresionantes vitrales de colores, que filtran la luz solar y llenan el interior de los espacios con tonos vibrantes y coloridos.

    Al entrar a una de estas majestuosas estructuras, se experimenta una sensación de asombro y reverencia. Los techos abovedados y las columnas proyectan una sensación de grandeza y elevación, transportando al visitante a un estado de admiración. La iluminación cuidadosamente diseñada, a través de vitrales y ventanales, crea una danza de luces, sombras y colores que resalta la belleza y el misterio del entorno del espacio. Los sonidos de los cánticos y los pasos resonando en los espacios sagrados crean echo y añaden una dimensión acústica a la experiencia, creando una atmósfera espiritual y trascendental. Todo esto en conjunto sumerge al individuo en un viaje sensorial que estimula tanto la mente como el espíritu, permitiéndole apreciar plenamente la grandiosidad y la serenidad de estos lugares sagrados.

    A través de su belleza y elaborada estructura, las catedrales góticas revelan el ingenio de los arquitectos y constructores del siglo XII y XIII. Estos edificios no solo son símbolos de la fe y devoción de la época, sino también ejemplos de la capacidad humana para crear obras maestras duraderas en momentos donde no existía la tecnología avanzada. La simetría perfecta, los arcos apuntados y los cristales teñidos muestran un dominio técnico y estético que aún hoy nos asombra. Al admirar estas catedrales góticas, somos transportados en el tiempo y podemos apreciar la visión audaz y la habilidad artística de los arquitectos que las diseñaron. Son tesoros arquitectónicos que nos recuerdan la grandeza y el legado de la arquitectura clásica.

Referencias:

https://youtu.be/D40JhGKVUVM

https://youtu.be/RUBnNDloGHg

 

Shirley Ortiz

Prof. Isado

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